domingo, 31 de mayo de 2015

Kafka: la humildad de un genio



Todas las tardes, Kafka sale a dar un paseo por el parque. La mayoría de las veces, Dora lo acompaña. Un día, se encuentran con una niña pequeña que está llorando a lágrima viva.


Kafka le pregunta qué le ocurre, y ella contesta que ha perdido su muñeca. Él se pone inmediatamente a inventar un cuento para explicarle lo que ha pasado. “Tu muñeca ha salido de viaje”, le dice. “¿Y tú cómo lo sabes?”, le pregunta la niña. “Porque me ha escrito una carta”, responde Kafka. La niña parece recelosa. “¿Tienes ahí la carta?”, pregunta ella. “No, lo siento”, dice él, “me la he dejado en casa sin darme cuenta, pero mañana te la traigo.




Kafka vuelve inmediatamente a casa para escribir la carta. Se sienta frente al escritorio y Dora, que ve como se concentra en la tarea, observa la misma gravedad y tensión que cuando compone su propia obra. No es cuestión de defraudar a la niña. La situación requiere un verdadero trabajo literario. 


Al día siguiente, Kafka vuelve al parque con la carta. La niña lo está esperando, y como todavía no sabe leer, él se la lee en voz alta. La muñeca lo lamenta mucho. Necesita salir y ver mundo, hacer nuevos amigos. No es que no quiera a la niña, pero le hace falta un cambio de aires, y por tanto deben separarse durante una temporada. La muñeca promete entonces a la niña que le escribirá todos los días y la mantendrá al corriente de todas sus actividades.




Ahí es donde la historia empieza a llegarme al alma. Ya es increíble que Kafka se tomara la molestia de escribir aquella primera carta, pero ahora se compromete a escribir otra cada día. ¿Qué clase de persona hace una cosa así? Y cumple su compromiso durante tres semanas. Uno de los escritores más geniales que han existido jamás sacrificando su tiempo (su precioso tiempo que va menguando cada vez más) para redactar cartas imaginarias de una muñeca perdida. Dora dice que escribía cada frase prestando una tremenda atención al detalle, que la prosa era amena, precisa y absorbente. La muñeca crece, va al colegio, conoce a otra gente. Sigue dando a la niña garantías de su afecto, pero apunta a determinadas complicaciones que han surgido en su vida y hacen imposible su vuelta a casa. Poco a poco, Kafka va preparando a la niña para el momento en que la muñeca desaparezca de su vida por siempre. Procura encontrar un final satisfactorio, pues teme que, si no lo consigue, el hechizo se rompa. Tras explorar diversas posibilidades, finalmente se decide a casar a la muñeca. Describe al joven del que se enamora, la fiesta de pedida, la boda en el campo, incluso la casa donde la muñeca vive ahora con su marido. Y entonces, en la última línea, la muñeca se despide de su antigua y querida amiga.


Para entonces, claro está, la niña ya no echa de menos a la muñeca. Kafka le ha dado otra cosa a cambio, y cuando concluyen esas tres semanas, las cartas la han aliviado de su desgracia. La niña tiene la historia, y cuando una persona es lo bastante afortunada para vivir dentro de una historia, para habitar un mundo imaginario, las penas de este mundo desaparecen. Mientras la historia sigue su curso, la realidad deja de existir.”

FUENTE: el contenido del post es una recopilacion de distintas fuentes de informacion.


viernes, 9 de enero de 2015

Las clases de Borges en "el aprendizaje del escritor"

LAS CLASES DE BORGES

caratula del nuevo libro.
editorial: sudamericana
genero: ensayo

la genialidad y el ingenio , de quien fue y sera por siempre perteneciente a Jorge Luis Borges, sera plasmada en una obra cuyas lineas llevaran las clases del seminario que dicto el maestro argentino en la universidad de columbia.

la obra se publico hace apenas unos meses, y lleva como titulo: " El aprendizaje del escritor", la cual debemos las gracias a la editorial sudamericana. de este modo el libro transcribe en especial el seminario sobre escritura que Jorge Luis Borges ofreció en la universidad de Columbia en 1971. consecuentemente, el libro se divide en tres secciones: en la primera, borges habla sobre la escritura, sobre su propio oficio como hombres de letras. en la siguiente sección, el tema de fondo es la composición de poemas. finalmente, la última se centra en la traducción y sus múltiples complicaciones y posibilidades, pues Borges siempre se infundía la tarea de que sus libros, sea el idioma es que luego sea traducido, mantenga la misma belleza, de su lengua natal. también están transcritas las preguntas, que le hicieron, en cada ocasión, los estudiantes que asistieron al seminario, así como las respuestas que Borges les dio.


En suma, "el aprendizaje del escritor" es un buen libro, que nos brindara la oportunidad de conocer el oficio de ser un escritor, del que Luis Borges era un maestro, un capo, y por qué no, un dios. cierro el telón.

sábado, 3 de enero de 2015

Lord Byron y su adicción al sexo

Lord Byron y su adicción al sexo



La fuerza creativa por antonomasia, potencia indomable, sustrato del mundo. El sexo fue la adicción de Lord Byron, quien, según la leyenda, durante un solo año en Venecia fornicó con más de 250 mujeres y no pocos hombres. Su obsesión lo llevó a conservar un poco del vello púbico de cada una de las personas con quien estuvo y guardarlo en un sobre con el nombre correspondiente.

miércoles, 31 de diciembre de 2014

coleccion pdf jeran paul sartre

Jean-Paul Sartre




Jean-Paul Sartre. Filósofo y escritor francés. Precoz lector de los clásicos franceses, en 1915 ingresó en el liceo Henri IV de París y conoció a Paul Nizan, con quien inició una estrecha amistad. Al año siguiente, el segundo matrimonio de su madre (considerado por Jean-Paul como «una traición») lo obligó a trasladarse a La Rochelle; hasta 1920 no regresó a París. En 1924 inició sus estudios universitarios en la École Normale Supérieure, donde conoció a Simone de Beauvoir, con quien estableció una relación que duraría toda su vida.



Tras cumplir el servicio militar, empezó a ejercer como profesor de instituto; en 1933 obtuvo una beca de estudios que le permitió trasladarse a Alemania, donde entró en contacto con la filosofía de Husserl y de Heidegger. En 1938 publicó La náusea, novela que pretendía divulgar los principios del existencialismo y que le proporcionó cierta celebridad, al tiempo que se convertía en símbolo de aquel movimiento filosófico. Movilizado en 1939, fue hecho prisionero, aunque consiguió evadirse en 1941 y regresar a París, donde trabajó en el liceo Condorcet y colaboró con A. Camus en Combat, el periódico de la Resistencia.

En 1943 publicó El Ser y la Nada, su obra filosófica más conocida, versión personal de la filosofía existencialista de Heidegger. El ser humano existe como cosa (en sí), pero también como conciencia (para sí), que sabe de la existencia de las cosas sin ser ella misma un en sí como esas cosas, sino su negación (la Nada). La conciencia sitúa al hombre ante la posibilidad de elegir lo que será; ésta es la condición de la libertad humana. Eligiendo su acción, el hombre se elige a sí mismo, pero no elige su existencia, que le viene ya dada y es requisito de su elección; de aquí la famosa máxima existencialista: «la existencia precede a la esencia».

descargar obras de Sartre:

Novelas y Relatos
1938 - La náusea
1939 - El muro
1939 - La cámara
1939 - Eróstrato
1947 - La suerte está echada


Obras teatrales
1943 - Las moscas
1944 - A puerta cerrada
1946 - La puta respetuosa


Obras filosóficas
1938 - La trascendencia del ego
1939 - Bosquejo de una teoría de las emociones
1940 - Lo imaginario. Psicología fenomenológica de la imaginación
1943 - El ser y la nada
1945 - El existencialismo es un humanismo
1960 - Crítica de la razón dialéctica (vol. 1)


Otras obras
1946 - Reflexiones sobre la cuestión judía
1964 - Las palabras

martes, 30 de diciembre de 2014

Francisco Bendezu y su famoso poema "Twilight"


 Francisco Bendezu y Twilight

Este post, pretende rendirle un pequeño homenaje al creador de uno de los más extraordinarios poemas de amor que se hayan escrito en la lengua española, francisco bendezu, paco, para sus amigos. Murió abandonado, tras una larga agonía entre rumas de periodicos viejos, en su casa de jesus maria. Acababa de ser nombrado patrimonio vivo de la nación, por el Instituto Nacional de Cultura, lamentablemente partió un 16 de febrero del 2004.

en estas microlineas recordamos con afecto a quien fue un eximio poeta en todas sus dimenciones, de estilo refinado y noble en poesia, paco bendezu es autor de la siempre tristisima "Twilight" poema donde encarna todo el amor que el alma humana puede resistir...

                       
 "twilight"

             



recordando a Julio Ramon Ribeyro

“Nadie me ha llamado nunca un gran escritor. Porque seguramente no soy un gran escritor”.

Julio Ramon Ribeyro, el mestro aun vive


Era la persona más tímida que he conocido, con una verdadera inhibición para las mujeres, así lo describe el nobel MVLL, y es que nuestro siempre entrañable cuentista Julio Ramón Ribeyro, era de un alma sumamente frágil, y de personalidad más aun introvertida. De esta manera lo recuerdan sus amigos más jóvenes como Guillermo niño de guzmán o Fernando Ampuero, con los que gustaba navegar en su última estancia en lima.

Sus escritos son un testimonio espiritual, donde el lector podrá encontrar a un Ribeyro inmerso en su continua soledad. Con un estilo  elegante y su ironía y amarga lucidez, dotan a su producción literaria, de una forma distinta de concebir la realidad, donde lo real es extraño y lo central se esconde en hilos invisibles como la mirada del narrador.




Empecé a leer a Ribeyro en una noche de crisis asmática, en la cual carecía del salbutamol, y como no podía dormir a causa de los espasmos, fui a la biblioteca de mi padre (entonces no teníamos televisión)  abrí la primera página del primer libro que me fue más cercano al pequeño escritorio donde al menos una vez me habían sentado y recluido al castigo. Era una versión póstuma de la palabra del mudo, busque en el índice y el título que más simpatía me dio, fue: por las azoteas, sin ser un lector voraz, recuerdo haber leído cada línea de ese cuento enternecedor con una atención única e inquebrantable. Desde allí comenzó mi afición a los libros y sobre todo, mi fanatismo  hacia este gran escritor.

Recuerdo también a un Ribeyro delicado de salud, con bata blanca y enfermo de cáncer a causa del tabaco, alojado en un hospital de Europa, y en el pasillo de los que ya no tienen cura, pero siempre Ribeyro, acompañado de sus infaltables Chesterfield y como no, los lucky.



Ribeyro siempre se caracterizó por ser un hombre extremadamente delgado, o como mi profesora de literatura le decía: mi flaco favorito. Parco pero al mismo tiempo divertido, Ribeyro era de esa clase de escritores, destinados al anonimato, a los que no les gustas las cámaras, ni la multitud. Amaba el silencio, pero de una manera obligada, pues en sus escritos comprobamos que todas las sendas de nuestro escritor, siempre iban a un mismo lugar, a la oscuridad, a la soledad, y al conformismo, como él mismo lo ha dicho: “el conformismo esta tan arraigado en mí, que puedo acostumbrarme a todo, hasta a la felicidad”


Últimamente recuerdo a un hombre flaco asomarse a su ventana y ver con mirada inteligente la fragilidad e incertidumbre de su ser, aquel ser que se debate entre la tara de la soledad, y el silencio de una noche miraflorina.